ondinas

Visitando mares virtuales

3.25.2008

Tribus urbanas juveniles

Me ha llamado enormemente la atención lo que ha sucedido en los últimos tiempos con las llamadas ‘tribus urbanas juveniles’. En varias partes de la República Mexicana han habido enfrentamientos violentos entre grupos juveniles con identidades diversas, sobre todo entre los llamados ‘fresas’, los ‘punketos’, los ‘rastas’ y, sobre todo, los muy famosos ‘emos’. En estos últimos días hemos presenciado riñas entre estos grupos, como por ejemplo la que hubo en Querétaro antes de iniciar la Semana Santa en la que grupos de ‘fresas’ organizaron por Internet una golpiza contra los ‘emos’, la que se llevó a cabo en la plaza central de esta ciudad. Cuando les preguntaron por qué lo habían hecho, argumentaron, entre otras cosas, que porque los ‘emos’ no son ‘originales’ y ‘parecen gays’.

Al rastrear la historia de los diferentes grupos juveniles que han existido a lo largo de la historia -desde la aparición de la juventud como categoría visible sobre todo en el siglo XX- nos podemos dar cuenta de que cada grupo juvenil como los ‘skinheads’, los ‘rastafari´’ o los ‘darketos’ mantienen estilos identitarios que difícilmente tienen una sola raíz, es decir, que son mezclas de diferentes signos, a veces contradictorios, que suelen denominarse contraculturales (con las reservas para la utilización de este término). Por ello parece paradójico el empleo de la palabra ‘originalidad’ en este caso. En segundo lugar, me parece significativo que de entre tantos descalificativos que se puedan aplicar a los ‘otros’ diferentes a uno, se escoja el de la posible ‘desviación sexual’ o más bien el ‘parecer mujeres’ como una de las características más aberrantes a resaltar. Con esto se podría plantear que aún somos una sociedad muy intolerante hacia lo diferente, lo débil, lo femenino.

Todo esto da pie a otro tipo de reflexiones, pero por tiempo, sólo apunto estas ideas que han surgido en este momento.

10.09.2007

FRAUDE TELCEL

Ahora me ha tocado a mí ser víctima de un fraude telefónico de los que tan comunes son últimamente en México. Resulta que en mi celular, de reciente adquisición, apareció esta mañana un mensaje que decía que “Radiomovil DIPSA de TELCEL” me otorgaba un premio de 500,000 pesos por el plan TELCEL que había contratado. Este mensaje venía del número de teléfono 044 5532759691. Me sonó de inmediato ilógico (¿quién regala tanto dinero en estos tiempos?, ¿el señor Slim? Imposible) pero por la tarde, por pura curiosidad, hice la llamada al número al que según tenía que llamar el 8991515158. Primero me contestó un chavo que de inmediato me pasó con otro, también chavo (primera inconsistencia) quien entusiasta me corroboró lo del premio pero que tenía que cubrir algunos requisitos: primero, que le diera mi número de credencial de elector (lo cual hice, aunque me arrepiento), que le confirmara la hora a la que había llegado el mensaje y, por último (y aquí viene la transa) que “comprara dos tarjetas de TELCEL de 500 pesos cada una y que le diera el código de éstas”. Aquí es cuando, obvio, todo marcaba hacia un seguro fraude y el chico, al ser seguramente novato en esto, se puso nervioso al decir “si desconfía, le doy mi número de cédula profesional” (¿por qué el número de cédula? ¡qué babas!). Le dije: “Si, confío mucho. Ahorita le llamo otra vez y le doy estos números que pide”, pero él apresurado dijo: “No, no, los tiene que adquirir en este momento si no, pierde su premio… deje así su teléfono y yo la espero ¿o qué no quiere tener su dinero?” En ese momento colgué contrariada pues había perdido exactamente 20 minutos en esta llamada, la cual nunca se escuchó bien: se escuchaba lejos, con ruido y el tipo tenía que repetir lo que decía varias veces.

Pero lo anterior no es por lo que me he dignado escribir en este abandonado espacio. Lo que es digno de mencionar es lo difícil que resulta denunciar este tipo de cosas en México. Si perdí 20 minutos en esa fraudulenta llamada, perdí más tiempo en poder lograr denunciar el acto. ¿Cómo fue todo? Explico paso a paso para que a quien le suceda no tenga que ser víctima de este vía crucis:

1) En Internet busqué la página de TELCEL para denunciar lo que había pasado. Venía el número asterisco 111. (5 min.)

2) Llamé a este número y, como siempre con todos los negocios del tal Slim, te contesta una grabadora con miles de opciones pero sin ninguna persona que te atienda. Tuve que colgar pues si no ‘marcas la opción deseada’ cuando lo indica la grabadora tienes que se corta la llamada o te regresan al principio del menú. Lo intenté dos veces sin éxito. (6 min.)

3) Llamé al 040 para preguntar algún número en el que contestara una operadora de TELCEL. Me dieron el 25 81 33 44 y resulta que era el mismo menú que el anterior. Al intentar navegar por todo el maldito menú, logré por fin que un operador, muy amable y automático me contestara. Este operador me dijo que para fraudes telefónicos marcara el 25 81 33 45. (7 min.)

4) Llamé a este número y ¡era un fax! (1 min.)

5) Navegué por Internet para buscar más opciones, después de unos 5 a 10 minutos me encontré con los teléfonos de la Dirección General para Víctimas del Delito de la PGR, el 53464114 (teléfono nada accesible en su página).

6) Llamé a este teléfono y me pasaban de una extensión a otra pues como que nadie sabía exactamente quién debía atenderme. Después de un rato, una mujer me dijo: “Espere…” y me tuvo en la línea unos 10 minutos. Luego regresó, pidiendo una disculpa y me dio otro teléfono suplicándome que le volviera a llamar para ver si sí era correcto el teléfono porque la buena mujer no estaba del todo segura (¡!) Me dio este teléfono: 54840492 extensión 24229. En esto me tardé como unos 15 minutos.

7) Llamé a este número y estuvo ocupado como 10 minutos, cuando logré comunicarme no había una opción para marcar la extensión 24229 así que marqué el #6 (que era para atención a víctimas del delito) pero una mujer que contestó me dijo que volviera a marcar porque la opción que debía marcar era la #1 (¡!!!).

8) Nuevamente traté de hacer la llamada pero el teléfono estuvo ocupado como 20 minutos más. Cuando por fin logré que me contestara la grabadora y por fin logré marcar la opción #1, una voz indicó “Espere en la línea porque nuestros operadores están ocupados en este momento” y así me tuvieron unos 5 minutos más (¡¡¡¡¡). Finalmente un joven, que se escuchaba un poco harto pero atento, me contestó, le expliqué lo que pasó y lo capturó en una computadora. Al preguntarle que pasaría con esta gente, dijo: “Pues no se pueden rastrear inmediatamente porque son teléfonos celulares… esto se canaliza al departamento correspondiente y se hacen las investigaciones”. FIN

¡Qué desesperante! No quiero ni pensar en qué será cuando sucede algo más grave como un secuestro, violación, asesinato o un fraude mayor.

6.19.2007

Escuchemos música

6.08.2007

ESPACIO 2007

Espacio 2007 y todos los Espacios que Televisa ha organizado me parecen una aberración. Reúnen a jóvenes que gustosos van de todo el país para recetarles lo maravilloso que es Televisa, sus “estrellas”, sus famosos programas, lo grandioso e imprescindibles que son. Así se venden: “Amiguito, aquí puedes venir a saludar a Adal y Yordi”, “Tómate una foto con Carmencita Salinas”, “Ven y aprende a usar una cámara por ti mismo”, “Mira por ti mismo cómo se hace un programa de radio”. Los Espacios se llenan de jóvenes que son sobre todo estudiantes de comunicación, teatro, cine y que van con la infeliz esperanza de poder trabajar algún día en este gran consorcio y ser importantes artistas, productores o locutores. Esto es una doble crueldad para los jóvenes que acuden (o acudimos, porque alguna vez yo también fui con entusiasmo) en primer lugar porque ninguno o casi ninguno podrá tener trabajo en este lugar, a menos que: aguante trabajar sin pago por uno, dos o tres años (como a mi me lo propusieron un día), que aguante trabajar por tres pesos 24 horas al día, que tenga alguna palanca o que venda su lindo cuerpecito, sin contar con lo estresante que es trabajar todo el día, sin días de descanso en algunos de sus departamentos como los de Noticieros Televisa. En segundo lugar, este es el mejor experimento que Televisa ha realizado con los jóvenes: ¿qué mejor que reunirlos a todos e ir midiendo nuestra popularidad y raiting y de paso hacerles un bonito ‘cocowash’? Es una reunión de laboratorio donde los ratoncitos se juntan y son observados por los científicos pagados por el Azcárraga. ¡Qué bonito! ¡Qué felicidad!

Mejor sería que año con año generaran este mismo evento pero para VERDADERAMENTE dar empleo entre sus filas o entre sus empresas amigas a tantos jóvenes que están a punto de salir de la universidad y que pronto se encontrarán con el panorama desolado de la realidad en este país.

4.23.2007

Las marchas (hipócritas) de hoy

Ahora si salen a marchar a favor de la vida todas las almas puras y bondadosas, católicos fervientes (y no tanto) de México. ¡Qué bueno que se manifiesten! Como ya varios comentaristas lo han dicho ‘en una democracia todos deben expresar su opinión’, lo lamentable de todo esto es que en otros asuntos en los que vidas humanas están en peligro o se han extinguido ninguna de estas almas puras y bondadosas ha abierto su bocota. ¿Qué han dicho cuando aparecen mujeres muertas en Ciudad Juárez? ¿También marchan y amenazan a los posibles asesinos? ¿Qué dicen sobre la pobreza y miseria que cada día crece más en países como el nuestro? ¿Ha mandado el señor Benedicto XVI alguna protesta escrita o ha ordenado una cruzada para combatirla? ¿Por qué no dicen nada sobre las multinacionales que a través de prácticas desleales y violación de las normas laborales explotan a sus trabajadores, mujeres y niños? ¿Por qué no se pronuncian en contra de los asesinatos a periodistas que generalmente quedan impunes? Ya no soporto más que la iglesia en México esté influyendo en la política mexicana y menos aún que la clase política les rinda homenaje público. Quiero aclarar: yo no voté por este partido ultra-derechista que llegó al poder por segunda vez y en esta ocasión de manera turbia… ¡y pensar que apenas vamos iniciando!... esto será un via crucis...

4.13.2007

JESUCRISTO GAY


¿Qué les parece esta imagen? Este es un cartel elaborado por una estudiante llamada Nayla Alcántara y que fue presentado en una muestra de carteles que versaba sobre las “Identidades deseables e identidades indeseables de nuestro tiempo”, muestra que organizo desde hace un año y que tiene la finalidad de presentar temáticas relativas a la tolerancia, la interculturalidad, la equidad de género, el respeto a las creencias diferentes, a las capacidades diferentes, etc. Resulta que en esta ocasión, y para mi sorpresa, este cartel trajo consigo un gran revuelo entre la comunidad de la universidad en la que se presentó, a tal grado que tanto yo como la autora recibimos algunas amenazas.

¿Qué fue lo que pasó? El primer indicio de que algo ocurriría fue que siempre que yo pasaba por la mampara en la que se colgó el cartel éste estaba en el suelo; cosa extraña ya que ningún cartel de la muestra se podía descolgar pues estaban muy bien fijados, además de que había algunos policías vigilando el lugar. En una ocasión recibí una llamada de estos vigilantes pidiendo que quitara el cartel “porque se caía mucho y lo tenían que estar recogiendo”. Fui al lugar y lo que hice fue colgarlo de manera que no se pudiera volver a caer, cosa que no ocurrió porque a los dos días estaba otra vez en el suelo.

Después comencé a recibir correos electrónicos anónimos pidiéndome que quitara tan irrespetuosa manifestación, algunos incluso llegando a la ofensa o grosería. Hice caso omiso de éstos por lo que un día aparecieron frente a mi un grupo de jóvenes profundamente religiosos que no me pedían, sino que me exigían que quitara tal cosa de la muestra “ya que en las escrituras no decían que Jesús fuera homosexual” y que esto, por lo tanto, era una blasfemia. Yo les expliqué las razones por las que este cartel, como muchos otros, había sido incluido y que, entre otras cosas, si bien las escrituras no indicaban que fuera homosexual, tampoco decían lo contrario.

Estuve como una hora discutiendo tales cosas al grado de casi exasperarme hasta que algo los dejó tranquilos: “Miren jóvenes, si quito el cartel en este momento va a suceder como con la película de El crimen del padre Amaro, película que llegó a ser más famosa y conocida por el escándalo mismo que la iglesia propició que por su temática o calidad.” Los chicos estuvieron de acuerdo y prefirieron que tal ‘insulto’ no llegara a ser conocido por más gente por lo que se fueron menos agitados no sin antes decirme que rezarían por mí alma pues seguramente iría derechito al infierno…

Definitivamente como sociedad en México aún no estamos preparados para la apertura hacia la tolerancia, el libre flujo de ideas e ideologías diferentes, ni para afrontar temas como los de la no penalización del aborto o la eutanasia. Si una simple imagen escolar mueve a tal grado conciencias puras y santas como para llegar al descrédito y las amenazas ¡imagínense con temas de mayor envergadura social! Lamentablemente nos encontramos ante fuerzas muy oscurantistas que definitivamente no nos dejan avanzar hacia una sociedad menos injusta y más equitativa.